La permanencia en el domicilio de personas con TEA puede suponer grandes afectaciones en el bienestar psicofísico, personal y alteraciones en el comportamiento, estas respuestas emocionales y conductuales pueden variar según las características del entorno familiar de la persona.
El autismo afecta de manera diferente en cada una de las personas que lo padecen. Nos podemos encontrar diferentes respuestas, desde personas con TEA que se sentirán seguras y tranquilas en casa hasta personas la situación les puede crear niveles altos de ansiedad.
Las personas con TEA requieren de rutinas estables, necesitan estructura y orden, los cambios que supone el confinamiento pueden tener consecuencias en su salud y en sus familiares, sin embargo, hay que tener en cuenta, que un porcentaje elevado de personas con autismo, tienen asociadas otros trastornos mentales como la ansiedad o la depresión.
El equipo técnico de CERAC ha redactado una guía que te puede ser de interés. Puede descargarse-la aquí.